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Red Bull Racing confirmó este miércoles la salida de Christian Horner como CEO y jefe de equipo, poniendo fin a una etapa de 20 años en la que el británico lideró al equipo hacia 14 títulos mundiales (ocho de pilotos y seis de constructores). Su reemplazo será el francés Laurent Mekies, quien hasta ahora dirigía la escudería hermana Racing Bulls y cuenta con una amplia trayectoria en Ferrari y la FIA.
Aunque el comunicado oficial agradece el “trabajo excepcional” de Horner, no se han detallado las razones de su despido, lo que ha generado especulaciones en el paddock. En los últimos meses, Red Bull ha enfrentado una caída de rendimiento, tensiones internas con la familia Verstappen y la salida de figuras clave como Adrian Newey y Jonathan Wheatley.
La llegada de Mekies marca el inicio de una nueva etapa para Red Bull, que busca recuperar protagonismo en la Fórmula 1 tras perder terreno frente a McLaren, Ferrari y Mercedes. Analistas advierten que este cambio podría desencadenar un efecto dominó en el mercado de pilotos y en la estructura técnica de varios equipos.
