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Trump llega a la cumbre con Putin decidido a imponer su plan para Ucrania
Donald Trump encara hoy en Alaska una reunión clave con Vladimir Putin, en la que buscará presionar a Moscú para poner fin a la guerra de Ucrania bajo su fórmula de “territorio por paz”. La Casa Blanca minimiza las expectativas y habla de un “ejercicio de escucha”, pero funcionarios cercanos aseguran que Trump planea fijar los términos: qué territorio cedería Kiev y bajo qué garantías se mantendría la paz.
Si Putin rechaza el marco, Trump está dispuesto a aplicar duras sanciones, con respaldo bipartidista en el Senado. El presidente ruso, advierten analistas, podría optar por dilatar, aceptar parcialmente el acuerdo y seguir presionando en el frente.
El punto de fricción más grande: la exigencia de Moscú de que Ucrania renuncie a entrar en la OTAN y limite su ejército, condición que choca con la soberanía ucraniana. Según expertos, Putin estaría dispuesto a congelar las líneas actuales en Zaporiyia y Kherson, y retirarse de zonas cerca de Járkov y Dnipró, si Kiev entrega Donetsk y Lugansk.
Trump, frustrado por la falta de avances, quiere resultados rápidos. Pero como advierte el general Mark Milley, ninguna de las partes puede ganar militarmente; el reto será lograr un acuerdo que no neutralice a Ucrania y que sea, sobre todo, justo y duradero.
