SMOKING
El entrenamiento de la tripulación de cabina prioriza hasta el detalle más pequeño para garantizar la seguridad y el confort del pasajero. Por ello, las azafatas en formación practican sus tareas en una silla de entrenamiento ajustable que replica con precisión el espaciado y diseño de los asientos reales de un avión.
Esta herramienta simula la cabina para que las auxiliares aprendan a asistir de forma rápida y segura en procedimientos como las comprobaciones del cinturón, control de reclinación, y pasos de evacuación. También ensayan el servicio de comida, el manejo de equipaje y las posiciones de apoyo de emergencia, incluso con algunas sillas equipadas con movimiento hidráulico para simular turbulencias.
Este riguroso proceso forma parte de la disciplina ergonómica y de seguridad del entrenamiento. El objetivo es que cada movimiento se automatice, asegurando que el servicio a bordo y la gestión de emergencias sean tranquilos, seguros y perfectamente profesionales. La excelencia en la aviación comienza mucho antes del despegue.